Los creadores de opinión.

Este domingo el diario El Día ha publicado una entrevista a Mateo López, presidente del Colectivo Identidad Canaria. Parte de su intervención se ha centrado en el fenómeno migratorio. Más allá de sus discutibles planteamientos, lo que nos interesa en este espacio es subrayar el papel importante de los “Creadores de opiniones” en la construcción y reproducción de una visión simplista y reduccionista del fenómeno migratorio.En sociología de la comunicación se denominan “creadores de opinión” (Opinion Makers) a las personas que elaboran y difunden una opinión dentro de un determinado grupo de interés. Se trata a menudo de personajes públicos, expertos, políticos etc. Juegan un papel importante en la sociedad, puesto que son creadores de opinión pública. Sin embargo cuando se trata de temas delicados que pueden transformarse en “armas electorales”, como la inmigración, los expertos son sustituidos por pseudos expertos, que suelen tener fuerte apoyo de la política y de los medios de comunicación. Estos creadores de opinión se ocupan de alimentar el miedo, producen y reproducen imágenes fuertemente negativa de la inmigración a través de un lenguaje de la exclusión, reproducen la idea de la inmigración como amenaza a la identidad canaria; confunden medidas a largo plazo con medidas a corto plazo (“la ayuda debe ser en origen”); utilizan un discurso victimista “¿Dónde está la solidaridad? ¿Por qué nos los tenemos que quedar todos?" que culpabiliza sistemáticamente a los demás; defienden una concepción de la inmigración como problema que hay que erradicar, “Es la única manera de acabar con este tema”; y difunden informaciones alarmistas y claramente equivocadas: "Ahora la táctica ha cambiado, porque cuando cumplen 18 años, los niños pueden reclamar a sus padres", asegura."Así como pintorescas propuestas de prevención de las muertes en cayuco: “de esta manera seguirán muriendo niños ahogados en las costas canarias porque mientras que sí se repatría a sus adultos, no se hace lo mismo con los menores”.Algunos de los efectos negativos de estos discursos son: la simplificación de la realidad; la difusión de información claramente equivocada y la creación de un falso consenso, esto es, crean la ilusión entre la opinión pública que la mayoría de las personas están de acuerdo con sus planteamientos. Esto a su vez alimenta el fenómeno de la Espiral del silencio.